El mundo del golf ha sido sacudido hasta sus cimientos. Rory McIlroy, una de las figuras más famosas del deporte y una voz líder en defensa de la integridad y el respeto dentro del juego, anunció su retiro de todos los torneos celebrados en los Estados Unidos luego del impactante abuso dirigido a él y a su esposa durante la Ryder Cup 2025 en Bethpage Black, Nueva York.

La superestrella de Irlanda del Norte, que jugó un papel fundamental en la victoria de Europa por 15-13 sobre el equipo de EE. UU., confirmó su decisión en un sincero comunicado publicado el lunes por la mañana.
“Puedo soportar la presión, puedo soportar la derrota, pero no puedo quedarme impasible cuando insultan a mi esposa”, dijo McIlroy. “Eso no es competencia, es una pérdida de humanidad. Mis valores y mi familia están antes que los trofeos”.
La decisión sigue a una ola de indignación provocada por varios incidentes durante la Ryder Cup, en los que McIlroy y su esposa, Erica Stoll, fueron sometidos a abusos verbales por parte de sectores del público estadounidense. En un momento dado, un anfitrión invitado dirigió cánticos que contenían lenguaje vulgar a través de los altavoces, lo que llevó a McIlroy a confrontar a los funcionarios del torneo.

La controversia se profundizó cuando se arrojó un vaso de cerveza desde las gradas y Stoll falló por poco mientras acompañaba a su marido después del partido. Posteriormente, la PGA de Estados Unidos emitió una disculpa pública y la maestra de ceremonias del evento, Heather McMahan, renunció después de encabezar cánticos que incluían insultos obscenos dirigidos a McIlroy.
“Ningún jugador o miembro de su familia debería tener que experimentar eso”, añadió McIlroy. “El golf es un deporte de respeto, no de ridículo. Cuando se cruza esa línea, es hora de tomar una posición”.
La retirada de McIlroy marca una de las decisiones personales más dramáticas en la historia del golf moderno. Significa que el cuatro veces campeón de Majors no competirá en algunos de los torneos más emblemáticos del deporte, incluidos el Masters, el US Open y los principales eventos del PGA Tour. En cambio, McIlroy dice que se centrará exclusivamente en el DP World Tour en Europa y posiblemente en eventos seleccionados en Asia y Medio Oriente.
La medida ha dividido la opinión dentro de la comunidad del golf. Algunos han elogiado la postura de McIlroy como un poderoso mensaje contra la creciente toxicidad entre los fanáticos, mientras que otros han expresado su decepción por perder a una de las mayores estrellas del deporte en los torneos estadounidenses.
“Rory siempre ha sido sinónimo de clase y carácter”, dijo el ex número uno del mundo Justin Rose. “Si alejarse es lo que se necesita para recordarle a la gente que el respeto importa, entonces tal vez esta sea la llamada de atención que el golf necesita”.
La PGA de América ha prometido revisar las políticas de control de multitudes y los protocolos de comportamiento de los fanáticos para futuros eventos de la Ryder Cup y el PGA Tour.
Para McIlroy, sin embargo, la decisión parece definitiva. En sus palabras finales, enfatizó que el tema va más allá del golf:
“Ganar es temporal”, dijo en voz baja. “Pero la dignidad debería ser permanente”.
